Uno de los objetivos prioritarios del Proyecto Mochuelva es hacer partícipe del mismo al mayor número posible de alumn@s y profesores/as del centro. En este sentido hemos realizado un taller de análisis de egagrópilas de lechuza común (Tyto alba) dirigido al alumnado de Ciencias de la Naturaleza, de 1º de la ESO.
El taller se ha realizado con los dos grupos de primero y sus respectivos profesores de Ciencias de la Naturaleza, en tres sesiones, y utilizando para ello el laboratorio de Física y química del instituto.
Los objetivos que nos planteamos desde el Proyecto Mochuelva, con el alumnado de primero, al proponer la realización de este taller fueron:
- Introducir al alumnado en el conocimiento del grupo de aves de las rapaces nocturnas; concretamente la lechuza común, a través del estudio de las egagrópilas que nos permitirán descubrir algunas de las presas que forman parte de su alimentación.
- Aprender a diferenciar de entre los micromamíferos hallados en las egagrópilas, a roedores e insectívoros
- Sensibilizar al alumnado sobre la importancia de la conservación de esta especie, tan próxima y desconocida a la vez, y gran aliada de nuestros agricultores; a través de la comprobación de la capacidad rodenticida de la lechuza común.
- Acercar al alumnado que ha comenzado su andadura en la educación secundaria a un proyecto que les acompañará en mayor o menor medida en su permanencia en el centro, y en el que tendrán su máxima implicación cuando estén en 3º, tanto en Biología y geología, como en la optativa de Laboratorio de biología.
El taller se ha desarrollado durante tres sesiones en las que el alumnado distribuido por parejas analizaba una egagrópila de lechuza común, extrayendo y clasificando cráneos, mandíbulas y otros huesos de micromamíferos, junto a otros restos y presas que forman parte de la dieta de esta rapaz nocturna.
La actividad ha tenido muy buena acogida y el alumnado ha mostrado gran interés en la realización de la misma.
Para complementar la actividad, al final de la misma se repartió entre los jóvenes un díptico sobre las acciones dirigidas a la conservación de la lechuza común en la comarca de l’Horta de Valencia que realiza la entidad conservacionista Societat Valenciana d’Ornitologia, a través del Projecte Mussols, y que os adjuntamos a continuación:
Por último, añadimos diferentes opiniones del alumnado participante:
Carmen Cortés y Lidia Sánchez:
«Durante tres días, Valentín y Josep con los alumnos de 1ºB, hemos realizado un análisis de egagrópilas.
Primero hicimos una ficha con los datos de la egagrópila y más tarde la metimos en agua para poder comenzar a extraer los huesos. Cuando sacábamos los huesos los poníamos en agua y después para que se blanqueasen los pusimos en agua oxigenada.
Después pusimos cartulina negra en la ficha donde los íbamos a clasificarlos para que, al ser los huesos blancos, se pudiesen observar.
Por último, cuando los huesos ya estaban blancos, los pegábamos en la cartulina ya clasificados, añadimos una muestra de pelo y ya estaba terminado.
Nosotras dos, nos lo hemos pasado muy bien en el taller, ya que a las dos nos ha parecido muy interesante».
Marcos Pérez y Raúl Navarro:
«Hace unas semanas tuvimos un taller que trataba sobre egagrópilas con Josep y Valentín.
Nos llevaron al laboratorio y una vez allí nos enseñaron a diseccionar las egagrópilas. Lo primero que hicimos fue llenar unos cuencos de agua para deshacer la egagrópila de Ribarroja, fue un poco asqueroso porque nuestra egagrópila tenía heces por encima. Marcos sacaba los huesos de un cuenco para luego limpiarlos en otro y a la vez meterlos en agua oxigenada, mientras que yo, Raúl deshacia la egagrópila y le comentaba a Marcos lo mal que olía. También Marcos hizo una hoja donde había que poner los datos de la egagrópila, más tarde yo sacaría los huesos del agua oxigenada y los ponía a secar, mientras que Marcos se puso a fregar los cuencos. En esos dias aprendimos muchas cosas y nos lo pasamos muy bien, porque era muy divertido y a la vez perdiamos clase. El último dia pegamos los huesos en la cartulina y yo me lo llevé, porque Marcos no queria por el olor que echaba».
Pilar Álvarez y Cristina Martínez:
«El miércoles, día 5 de febrero de 2014, jueves 6 y martes 11 vino Valentín a darnos un taller a los alumnos de 1º B de secundaria sobre las egagrópilas.
Una egagrópila es, lo que regurgitan las aves. En el 1er paso, cogimos las egagrópilas y las echamos a un cuenco con agua donde se le fue lo que pudo y el resto nosotros/as; cogimos los huesos y los echamos a otro cuenco con agua. Más tarde, los metimos en un pequeño vasito con agua oxigenada, y durante un día entero lo dejamos reposar.
Al día siguiente, preparamos la cartulina, recortando varias medidas de otra cartulina negra para que los huesos se vieran bien con esa blancura que ya tenían y que les daba el agua oxigenada.
Al día siguiente y ya el ultimo, fuimos para sacar los huesos del vasito, secarlos, colocarlos y clasificar los huesos y terminar ese fabuloso taller de egagrópilas.
Nuestra opinión es muy positiva, no pareció fabuloso porque aprendimos mucho nos lo pasamos bien, aprendimos sobre las aves…»
Laura Chiva:
«La egagrópila que me tocó a mi, estaba recogida en Requena. Lo primero que hice fue pesar la egagrópila; la mía pesaba 78g. Luego la eché a un recipiente lleno de agua, para poder deshacerla y sacar los huesos y echarlos a un líquido blanqueante. Al día siguiente, saqué los huesos del líquido blanqueante y separé los huesos porque estaban todos juntos, puse cola blanca en una cartulina negra y ahí los pegué todos pero separados por grupos.
A mí este taller me ha gustado mucho y además he aprendido cosas sobre las egagrópilas. Pero todo esto fue gracias a Valentín que fue él quien nos hizo el taller de las egagrópilas».